Durante el día de hoy los jóvenes de nuestra Iglesia estuvieron realizando un retiro inspirados en el siguiente texto de 1 Juan 2: 15-17:
"15 No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él.
16 Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo.
17 Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre."
Un mensaje hermoso para la juventud del siglo XXI. Que por su ingenuidad buscan crear una identidad propia basada en las apariencias, costumbre fortalecida por las presiones de las redes sociales tales como Instagram y TikTok.
Pero más allá de la pantalla del teléfono... la iglesia de Cristo tiene el deber de evangelizar a los jóvenes y a todo aquel que viva lejos de Dios. La angustia que genera los estándares carnales e inalcanzables que imponen las sociedad actual, nos vuelve miserables y sobre todo, nos aleja de Dios y del verdadero amor.
"4 Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó,
5 aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos)," (Efesios 2:4-5 RV1960).
El copastor Monserrate López fue quien predicó. Y nos enseñó que la verdadera libertad del jóven es Cristo y que la esclavitud y lo que apresa es el pecado. (Juan 8:34-36).
"34 Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado.
35 Y el esclavo no queda en la casa para siempre; el hijo sí queda para siempre.
36 Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres."
Agradecemos a todos los jóvenes y líderes que apoyaron ésta iniciativa de sacar tiempo para Dios y los jóvenes. Les amamos en el Señor. ¡Hasta a la próxima!
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